Buenos Aires, 17 dic (Prensa Latina) Fortalecido y dispuesto a seguir dando la pelea, el expresidente boliviano Evo Morales apuntó hoy aquí que mientras tenga vida seguirá haciendo política por los más humildes.
En proceso para pedir refugio político en Argentina, a donde llegó el pasado jueves, el exmandatario, víctima de un golpe de Estado, ofreció una rueda de prensa con medios nacionales y extranjeros en la que apuntó que trabaja en la campaña de su partido político MAS (Movimiento al Socialismo) para las venideras elecciones y en la lista de precandidatos buscarán uno que represente a todos.
Tras subrayar que llegó a la presidencia de Bolivia con la verdad, la honestidad, la lucha sindical, pensando siempre en la patria y no en la plata, señaló que está fuerte, enfocado en la campaña y pidió elecciones libres, sanas y transparentes en su país, tras remarcar que no puede haber persecuciones políticas.
No seré candidato, pero tengo todo el derecho a hacer política, apuntó el exmandatario tras pedir una comisión electoral de cara a los comicios, previstos para el primer trimestre del 2020.
Ojalá sea Naciones Unidas, el Consejo de Premios Nobel de la Paz o el Centro Carter, cualquier organismo menos la OEA (Organización de Estados Americanos), dijo.
Sobre el candidato que representará al MAS, destacó que hay varias propuestas, algunos rostros muy jóvenes. Tenemos muchos líderes, vamos a buscar un candidato unitario y lo acompañaremos, sostuvo.
Morales se mostró confiado en que su partido ganará en las elecciones y para ello trabajan en garantizar el voto duro de los indígenas, de la clase media y de un sector empresarial que prosperó durante los 13 años de su gobierno y que quiere seguir abrazando ese crecimiento.
Tras el golpe de estado que sufrió hace ya poco más de un mes, señaló que el mayor pecado es haber hecho tres cosas: en lo político, refundar a una Bolivia que pasó de ser un estado colonial a uno plurinacional, en lo económico la nacionalización de los recursos naturales, y lo más importante en lo social, la redistribución de la riqueza.
Al apuntar que no habrá paz si no hay justicia social, enfatizó que desde Bolivia con mucho esfuerzo su gestión demostró que otro mundo es posible, que una Bolivia sin el Fondo Monetario Internacional es posible, sin las políticas impuestas desde arriba y afuera, ese fue nuestro mayor delito, expresó.
Sobre las falsas acusaciones en su contra resaltó que siguen buscando pruebas y ahora lo acusan de supuesto enriquecimiento ilícito y advirtió que el golpe contra su gobierno no solo fue un golpe a un presidente indígena sino al litio.
Recordó por último que mañana se cumplen 14 años del día de la Revolución democrática cultural. Con problemas ahora, pero estoy seguro que vamos a recuperar el poder de los movimientos sociales y campesinos en Bolivia con la lucha pacífica, manifestó.
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